Los Composites garantizan la construcción de infraestructuras más fuertes que permiten a los EEUU resistir los golpes de la naturaleza

Publicado el día 10 septiembre 2018




Durante 2017, huracanes, incendios forestales, inundaciones y tornados azotaron a los EE. UU., infligiendo daños valorados en millones de dólares en carreteras, puentes, redes eléctricas y otras infraestructuras. Daños que pueden evitarse, según la Sociedad Estadounidense de Ingenieros Civiles #ASCE, si los EEUU invierten 4,6 billones de dólares en 2025 para realizar reparaciones y remplazos utilizando composites.

El uso de #MaterialesCompuestos puede ayudar al país a mejorar el rendimiento de sus infraestructuras y con ello, la calidad de vida de las personas con una simple inversión. Así lo ha puesto recientemente de manifiesto la subdirectora del laboratorio de ingeniería del Instituto Nacional de Estándares y Tecnología, Joannie W. Chin, quien manifestó que “Los materiales compuestos avanzados a menudo son más resistentes, más livianos y más duraderos que los materiales de construcción tradicionales, lo que ofrece muchos ahorros de costes».

Esto garantiza una vida más duradera para los componentes de infraestructuras que incluyen compuestos avanzados, tales como puentes, carreteras, presas, diques, ferrocarriles, postes y otros elementos esenciales para el día a día de un país. Los huracanes, las tormentas de hielo y los fuertes vientos frecuentemente derriban postes de teléfono de madera, lo que reduce el suministro de electricidad a miles de hogares y negocios. Los postes resistentes de FRP ayudan a las empresas a mantener las luces encendidas.

Los postes compuestos son más respetuosos con el medio ambiente, no requieren el uso de conservantes químicos como la creosota y son más fáciles de instalar en lugares de difícil acceso. Los postes compuestos cuestan de dos a cuatro veces más que los postes de madera, y eso ha desalentado a muchas utilidades de instalarlos. Pero tienen una vida útil de 60 a 80 años, el doble que un poste de madera. A largo plazo, las compañías eléctricas que usan postes de FRP ahorran dinero porque están pagando los costos de instalación solo una vez en 60 años en lugar de dos veces.

Las instituciones públicas deben entender que un poste compuesto permitirá a la instalación ser más segura, más duradera, resistente y versátil. Más respetuosa y sostenible y a medio plazo. También podrá garantizar su funcionamiento de forma más económica. Y hablamos de factores que pueden aplicarse a otras infraestructuras y sobre los que continuaremos divulgando pues, habida cuenta de los beneficios, el uso de los composites en estructuras públicas no sólo es beneficioso para el conjunto de la sociedad, sino que a medio y largo plazo, es más económico y rentable, lo que hace de su uso un camino de paso obligado. Antes o después.